Los planes del Pentágono para obtener mayor dominio en el ciberespacio han sido recientemente congelados por el Congreso de los EE.UU. que está preocupado por la idea de dar demasiado poder a los Generales Militares en la red de Internet.
Según el Washington Post, el Pentágono pretende disponer de órdenes de combate para defender su red mundial de sistemas informáticos. El sistema de defensa Informático, Apodado el Doble comando cibernético es parta consolidar las capacidades ofensivas y defensivas existentes bajo un mismo techo.
Sin embargo, el plan ha sido congelado desde las más altas esferas del congreso estadounidense debido básicamente a un conjunto de preguntas, centradas principalmente en por ejemplo cual es su misión, y otras preguntas se centran en temas de la posible privacidad, de acuerdo con funcionarios familiarizados con las discusiones.
Algunas de las cosas que preocupan al Congreso son preguntas de cuando se debe considerar cualquier acto en el ciberespacio, como un hecho de guerra y en qué medida el Pentágono estará capacitado realmente para defender sus propias redes. Se teme, por ejemplo, que el uso militar de los EE.UU. en las escuchas telefónicas, podría ser usado de forma inadecuada o ir demasiado lejos y la idea es que si se pone en funcionamiento un comando cibernético para defender a los estados unidos de las agresiones externas desde internet, entonces esto podría ser mucho peor.
Por un lado, devolver el Pentágono la defensa de las redes sin necesidad de balas es bastante sencillo. Sin embargo, los políticos quieren sopesar más detenidamente si esta defensa agresiva permitirá que el Pentágono defienda eficazmente las redes militares, en particular si se trata de un caso de ataque desde cualquier red privada.
Un oficial del Ejército de EE.UU. dice que el Pentágono actualmente tiene bajo vigilancia grandes redes de malware, fuera de su propia red, que son empresas privadas y que considera como enemigos potenciales. Estas amenazas podrían ser eliminada, lo que podría significar que si reciben la orden de ataque, podrían craquear sus servidores Botnets-zombies y apagarlos, o incluso algo mucho peor.
Hasta que el Congreso reciba las respuestas a estas preguntas, pasara algún tiempo antes de que el Pentágono pueda poner en marcha el comando de ataque cibernético.